lunes, 28 de febrero de 2011

El arte mexicano: exotismo o complejidad contemporánea

Por estos días se exhibe conjuntamente en dos museos del sur de California una exposición que pretende desestabilizar categorías tradicionales asociadas con México y con el arte mexicano. Casi siempre  cuando hablamos de arte mexicano surge ese concepto de  "mexicanidad" como una categoría fija y típica, que sólo se asimila a lo exótico, a lo Frida Kahlo y Diego Rivera.
Desafiando ese cliché, México: Expected/Unexpected es una exhibición de instalaciones, fotografías, videoartes, pinturas y otros medios tradicionales y contemporáneos de artistas mexicanos que se presenta conjuntamente en dos museos del sur de California: El Museo de Arte Latinoamericano (MOLAA) y el Museo de Arte Contemporáneo de San Diego (MCASD).

Con más de 100 obras de la colección de Isabel y Agustín Coppel, México: Expected/Unexpected muestra desde fotografías de los destacados mexicanos Manuel Álvarez Bravo y Graciela Iturbide hasta obras de artistas conceptuales contemporáneos como Gabriel Orozco y Teresa Margolles.
Esta muestra es una invitación a explorar el arte mexicano contemporáneo en intenso diálogo con sus precursores históricos y con el contexto internacional en el que se inscribe.  Es así como la presentación de las obras se articula alrededor de dos grandes ejes: por un lado, la exposición ofrece una colección abierta a la dinámica global que alimenta al arte contemporáneo en el momento actual y, por otro, una colección vinculada a un grupo de artistas mexicanos contemporáneos.
La colección Isabel y Agustín Coppel cuenta con figuras clave de la escena del arte contemporáneo mexicano como Gabriel Orozco, Francis Alÿs, Carlos Amorales, Abraham Cruzvillegas, Damián Ortega y Melanie Smith, entre muchos otros. Partiendo de la obra de estos artistas la colección se expande diacrónicamente, en un esfuerzo para establecer las posibles influencias y antecedentes de la obra de estos artistas, en las prácticas de figuras como Gordon Matta Clark, John Baldessari, Lygia Clark, Ed Ruscha, Ana Mendieta y Helio Oiticica. También se despliega sincrónicamente ya que incorpora jóvenes artistas internacionales con una poética que parece similar a la de los mexicanos, como Maurizio Cattelan, Fischli y Weiss, Kendell Geers Tatiana Trouvé, Rivane Neuenschwander y Terence Koh.
México: Expected/Unexpected explora una posible definición del arte mexicano contemporáneo, con obras que intentan superar esa noción como una categoría estable. En un movimiento que se hace eco de lo que parece estar ocurriendo en otras áreas de la cultura mexicana como el cine y la literatura.
La exposición opera como una especie de espejo que proyecta una imagen del arte mexicano contemporáneo alejado de estereotipos, dinámico, inestable, rico, complejo, impredecible, donde la tradición y la innovación están en constante interacción. El resultado sorprende, por una imagen contemporánea que está ahí donde el espectador sólo esperaría la simpleza del cliché. 

jueves, 24 de febrero de 2011

Alfredo Jaar: Articular estética y política

Una sorprendente instalación, por su marcada intención de articular estética y política, está abierta al público en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC), con sede en la Cartuja de Sevilla, España, hasta el próximo 15 de mayo. Se trata de la obra The Marx Lounge, del artista Alfredo Jaar (Santiago de Chile, 1956), que se constituye en un repaso al marxismo a través de su creador y de sus principales referentes.
Una gran mesa de 20 metros llena de 500 libros es la pieza central de la exposición, ubicada en un espacio cuyas paredes y suelo pintados de rojo aluden a las ideologías tratadas. Al ser una instalación participativa, los espectadores podrán hojear libros de Karl Marx (Treveris, Alemania, 1818 - Londres, 1883), así como obras de teóricos y filósofos como Slavoj Žižek, Stuart Hall, Jacques Rancière, Ernesto Laclau, Chantal Mouffe, Fredric Jameson, Pierre Bourdieu, Frantz Fanon y otros, que ofrecen nuevos modelos de pensamiento y son muestra de la extraordinaria cantidad de conocimiento generado en las últimas décadas. Según el artista, ha habido una verdadera revolución intelectual, pero hay una gran distancia entre ésta y el mundo real.
La muestra también puede interpretarse como una gran sala de lectura, donde Alfredo Jaar invita al público a sentarse a leer y reflexionar sobre la importancia y viabilidad del marxismo en el contexto contemporáneo y sobre las ideas políticas y filosóficas más importantes surgidas en los últimos tiempos. Ideas que pueden servirnos para comprender un poco mejor nuestro presente.
Alfredo Jaar es un afamado artista latinoamericano que en 1986 sorprendió en la Bienal de Venecia con su obra Gold in the Morning, sobre el trabajo de hombres al borde de la esclavitud en las minas del cráter dorado de Sierra Pelada en Brasil; también es muy recordada su obra Proyecto de Rwanda (1996) sobre el genocidio racial en esa nación africana y el silencio cómplice de muchos países y organizaciones internacionales. En septiembre del año pasado, llevó a la Bienal de Liverpool una colección de textos políticos, literarios o filosóficos en torno a Marx. Y esa es la base de la actual exposición, enriquecida por numerosos fondos en nuestro idioma procedentes de la librería Laie y por abundantes ejemplares de El capital y de El manifiesto comunista, cedidos por el coleccionista catalán Emili Gasch; entre ellos, la primera edición española de El capital, que data de 1931.
De su obra, el artista expresa que “es una de las maneras de pensar el mundo. Ahí está descrito lo que ha ocurrido y lo que va a ocurrir. Pero hay una brecha entre esta información y el mundo real. Ya nadie sabe lo que es el marxismo. El sentido original está completamente perdido. Esta propuesta cobrará sentido cuando alguien abra un libro y se siente a leerlo en uno de los sofás. El promedio que un espectador dedica a contemplar una obra de arte es de tres segundos. Muy poco para un artista que dedica a su trabajo una vida entera. Esta es una obra que invita a pararse. Que le grita al espectador ¡pare, pare!"
Este trabajo conceptual irá cambiando a medida que los espectadores lean libros como El hombre unidimensional de Herbert Marcuse, El planeta enfermo de Guy Debord o La dominación masculina, de Pierre Bourdieu y los devuelvan a la mesa, tal vez a una posición distinta, que irá fotografiando la cámara de Jaar, testigo de una obra conceptual basada en "la verdadera revolución intelectual como potencial no realizado hasta la fecha".
Y Alfredo Jaar puntualiza: "Tenemos la oportunidad de poner en cuestión que, cuando nunca ha habido dinero para invertir en programas de salud, de cultura y de educación, hay una crisis económica y, como por arte de magia, aparece el dinero para salvar a los bancos. Siempre hay dinero para salvar esta maquinaria económica que provocó el desastre".

jueves, 10 de febrero de 2011

Arte y Vida Artificial

El Concurso Internacional Arte y Vida Artificial entregará hoy, en el Auditorio de Fundación Telefónica en Madrid, los premios a los artistas ganadores de la 13ª versión, que fueron seleccionados en el pasado mes de diciembre.
Los tres principales galardones recayeron en:
Sonia Cillari por Sensitive to pleasure. (Primer Premio, 18.000 euros). La ítalo-holandesa presentó una provocadora performance interactiva en la que analizaba la frustración provocada por la desconexión existente entre su experiencia vital y su producción audiovisual. Cillari es una artista  audiovisual y arquitecta que reside en Ámsterdam, Holanda y trabaja en la creación de mecanismos sensoriales y perceptivos en distintos entornos inmersivos y magnificados.
Gilberto Esparza por Plantas Nómadas (Segundo Premio, 14.000 euros). El mejicano hizo uso en esta pieza de diversos elementos orgánicos y tecnológicos para crear una entidad biocibernética que lleva a cabo en sí misma procesos de limpieza y elaboración de nutrientes. La obra de este artista que la habíamos relacionado en este blog: http://arte-actual.blogspot.com/2010/03/la-obra-de-arte-viva-no-por-mucho.html
Julián Oliver por Psworld. (Tercer Premio, 8.000 euros). Visión incisiva y elegancia formal caracterizan esta obra, en la que lo virtual se percibe como una representación de lo real para provocar en el espectador un sentimiento de ansiedad en torno a la concepción de su entorno. Se sirve para ello de la tecnología de un comando ps y de la herramienta Unix.
Dos colombianos fueron seleccionados en la modalidad de incentivos de producción: Alejandro Duque con TRUeQUE (7.000 €) y Andrés E. Burbano Valdés con New Dunites (5.000 €). Otros ganadores son María Teresa dos Santos Cardoso (Portugal) con Luz (10.000 €); Bruno Vianna (Brasil) con Liquid Satellite Garden (6.000 €); Ezequiel Fernández Lasnier (Argentina) con PROYECTO KOI (5.000 €); Sergio Soares Ferreira (Portugal) con Among (3.000 €), y Féliz Luque Sánchez (España) con Chapter II: Understanding Modularity (4.000 €).
La Fundación Telefónica mostrará en su stand de ARCOmadrid, entre el 16 y el 20 de febrero, las obras galardonadas, que fueron seleccionadas por un jurado constituido por José Carlos Mariátegui (Perú), Mónica Bello Bugallo (España), Nell Tenhaaf (Canadá), Rodrigo Alonso (Argentina), Simon Penny (EE.UU/Australia), Zhang Ga (EE.UU/China) y Francisco Serrano, Director General de Fundación Telefónica.
Mira el video de la obra de Sonia Cillari:


martes, 8 de febrero de 2011

Felix Gonzalez-Torres: Inestabilidad y potencialidad para el cambio

Una gran retrospectiva del artista cubano Felix Gonzalez-Torres (1957-1996) se exhibe en el El MMK Museum für Moderne Kunst de Frankfurt. Incluyendo cuadros rara vez vistos y conocidos, esculturas, obras fotográficas y proyectos públicos, esta gran exposición titulada  Felix Gonzalez-Torres. Specific Objects without Specific Form refleja el alcance total de la carrera corta pero prolífica de este excepcional artista. 
Nacido en Cuba, González-Torres se instaló en Nueva York a finales de 1970, donde estudió arte y comenzó su práctica como artista antes de su muerte prematura, a la edad de treinta y ocho años, debido a las complicaciones relacionadas con el SIDA. 
Participó en trabajos colectivos de arte con el Group Material en la década de 1980. Fue un activista social comprometido y, en un tiempo relativamente corto, desarrolló una profunda influencia de los trabajos en relación crítica con arte conceptual y el minimalismo, mezclando la crítica política, el impacto emocional y su interés fundamental en las formas, concretadas por una amplia gama de medios artísticos, que incluyó dibujos, esculturas y carteles públicos.
Hoy, su obra se considera innovadora e influyente para las generaciones posteriores de artistas. Como punto de partida para sus creaciones utilizó a menudo objetos de la vida cotidiana, tales como relojes, espejos y lámparas.
Sus trabajos más conocidos incluyen grandes cantidades de dulces y pilas de papel amontonadas de los que se sirven los visitantes. Con estas obras minimalistas y con sus guirnaldas de bombillas de luz, González-Torres exploró la relación entre el tiempo del arte y la existencia humana. 
El sentido de estas obras de arte se basan, al igual que en gran parte de lo que hizo, en una inestabilidad y potencial para el cambio de conceptos. El resultado es un cuerpo de trabajo profundamente humano, íntimo y también frágil, ya que tiende a desestabilizar las certezas aparentemente inquebrantables: la obra de arte es estática e inmanente, el autor es el que termina la obra o una exposición es un lugar para mirar, pero donde no se puede tocar.